Se van a cumplir 30 años del copamiento al cuartel de La Tablada en provincia de Buenos Aires. Fue durante la madrugada del 23 de enero de 1989 y el presidente en ese entonces era Raúl Alfonsín.
Desde ese entonces se esta investigando y pidiendo justicia por los crímenes cometidos contra los detenidos por parte del ejercito. Se están llevando a cabo las audiencias del juicio oral y público, a cargo del Tribunal Oral Federal 4 de San Martín, contra el ex general Alfredo Manuel Arrillaga.
En ese marco el ex sargento del Ejército José Alberto Almada es un testigo clave de los asesinatos y desapariciones del copamiento del Regimiento de La Tablada. En referencia a Iván Ruiz y José Díaz, revelo que “Los sacaron vivos en un Ford Falcon Blanco”.
Este testimonio contradice la versión oficial, que niegan los asesinatos y torturas a los militantes del Movimiento Todos por la Patria (MTP), que en cantidad de 46 militantes, encabezados por el ex dirigente del PRT-ERP, Enrique Haroldo Gorriarán Merlo llevaron a cabo el ataque al cuartel.
El plan no salió como lo previsto y los militantes fueron cercados por unos 2.000 efectivos de las fuerzas de seguridad quienes reprimieron a sangre y fuego durante 36 horas, utilizando armas de fuego pesadas como morteros, ametralladoras antiaéreas, tanquetas, llegando incluso a utilizar bombas de fósforo, las cuales están prohibidas por convenciones internacionales.
El ataque dejó un saldo de 33 militantes muertos, 7 miembros del ejército y 2 policías. Entre los los 33 militantes del MTP hay cuatro desaparecidos: Iván Ruiz, José Díaz, Carlos Samojedny y Francisco Provenzano.
Ruiz y Díaz, fueron capturados con vida, como quedo registrado den fotos rindiéndose. Sin embargo ambos después fueron torturados y desaparecidos. Tanto Berta Calvo, como Pablo Ramos fueron fusilados con tiros a quemarropa.
Almada denunció el encubrimiento deliberado de todos estos años. “No soy el único que vio. Soy el único que se animó a decir la verdad. Todo lo que se vio es patrimonio internacional. Incluso todos los medios internacionales vieron a esas personas que estaban doblegadas y rendidas y fueron dadas por desaparecidas por el Ejército Argentino”, sentenció Almada, que en 2004 ya había denunciado en el diario Página/12 que vio cómo dos oficiales torturaron a Díaz y Ruiz luego de que se rindieran.
“Cuando entré por el fondo del cuartel, a esas personas las estaban torturando. Concretamente, las tenían boca arriba debajo de una arboleda y las estaban torturando dos oficiales. Uno hacía como que era el bueno y el otro, el malo. Uno de los chicos, eso quedó en mi conciencia muy lastimada, pedía: ‘Señor, regáleme la vida’. Nunca me voy a olvidar de eso”, señaló sobre los hechos ocurridos en enero de 1989.