Bueno parece ser que el mundo quiere ser un poco más justo, más democrático, más pensante. No, no es que como se decía al principio de esta pandemia el mundo iba a ser otro. Mentira es el mismo y diría que en algunos aspectos hasta es un poquito peor, pero en estos debates que se han dado de un montón de cosas que le molestaban al mundo estaba esto de como nos vemos, como nos pensamos, y no como nos vendieron durante años de un sistema capitalista patriarcal como éramos definidos en binarios macho o hembra, sin la posibilidad de poder sentirte diferente o sentirte como tal.
Pero se ve que algunas cosas ya eran imposibles de mantener de la misma forma y gracias a la lucha de un montón de gente que pelea día a día por sus derechos hizo que esto empezara a cambiar, horrorizadas las caras de aquellas y aquellos retrogrades recalcitrantes que sienten que pierden poder y lugares de privilegio ante estas horizontalidades que pasan.
Que terrible aquel o aquella persona que tuvo que vivir escondida en un cuarto sin poder ser tal cual es, quien le devuelve la cantidad de hora de juegos perdidas por no poder hacer lo que se quería, a donde irán los sentimientos de bronca de ese montón de voces que ahora gritan de placer y rebeldía.
El Gobierno presenta este miércoles un nuevo Documento Nacional de Identidad (DNI) para personas que no se identifican con los géneros femenino ni masculino.
El presidente Alberto Fernández encabezó este miércoles la presentación de un nuevo documento de identidad que incluye una acepción especial para personas no binarias, aquellas que no se identifican con los géneros masculino ni femenino, con el objetivo de garantizar el derecho a la identidad.
En los documentos de identidad y pasaportes deberá adaptarse la nomenclatura para que en el campo referido a “sexo” se pueda optar por “F” (femenino); “M” (masculino); o “X”.
La denominación “X” de un DNI no binario comprenderá a las acepciones: no binaria, indeterminada, no especificada, indefinida, no informada, autopercibida, no consignada; u otra acepción con la que pudiera identificarse la persona que no se sienta comprendida en el binomio masculino/femenino.