En la columna de historia política de este viernes, nos acompaña Daniel Campione en «el mundo vive equivocado».
“El 23 de abril se realizará una marcha, en movilización por la educación, llevada a cabo por la universidad y la CGT manifestó el propósito de estar presente, también estarán estudiantes, docentes, trabajadores y deberían participar madres y padres de los estudiantes, como también cualquier persona que defienda los derechos de la educación pública en general”, expresó.
En diálogo con el programa radial, comenta sobre los conflictos de Villa Constitución del año 1970, durante el tercer gobierno peronista, “esta lucha fue ejemplar porque actuaron allí todos los componen de la conflictivas del movimiento obrero de esa época”, comentó Campione.
En la represión estuvieron presentes policías provinciales, estatales y elementos policiales variados, todo se concentró para enfrentar un movimiento obrero local.
“4.000 efectivos represores, caravanas “auto simbólico” de la represión. La ciudad fue copada, se allanaron casas, sindicatos, encarcelada la comisión sindical, todo se hacia abajo el imperio de estado de sitio, quién respaldo de esas acciones. Las patronales respaldaron esta acción contra el movimiento obrero de la ciudad, tuvo intervención la embajada estadounidense”, expresó.
“Junto con la comisión metalúrgica, fueron detenidos militantes y la respuesta fue la huelga, donde llevaron a cabo asambleas, ocupación de establecimientos. La huelga se sostuvo 2 meses. Después de que la fábrica había sido desalojada, se concentró en los barrios, se organizaron guardias para enfrentar a bandas represoras”.
“El despliegue del estado represor fue amplísimo, alrededor de 4mil personas involucradas, la ferocidad en la represión fue un anticipo de lo que sería después la dictadura, no solo hubo detenidos sino que desaparecidos”, dijo.
“Las medidas represivas fue respaldadas por empresarios, debido a que la empresa facilito lista de los trabajadores a detener, les pagaron a represores, facilito transporte y también facilito espacio dentro de la fábrica “albergue de solteros” escenario de campo de depresión clandestina”.
“Cuando terminaba la dictadura, la lista marrón de Villa volvió a ganar la sección sindical, la derrota no fue definitiva”, cerró.
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