En la tarde de ayer, los trece organismos de Derechos Humanos se reunieron con la ministra de Justicia y Derechos Humanos, Dra. Marcela Losardo. La Liga Argentina por los Derechos Humanos expresó su honda preocupación por la situación de los presos políticos. En ese sentido,José Shulman, presidente de la Liga, asegura que planteó una serie de interrogantes que no fueron respondidos por la ministra.
«Salimos decepcionados. Preguntamos porqué no se reconoce a los presos políticos, cuál es la estrategia o política del gobierno para liberarlos, y porqué no se lo invitó a Diego García Sayán, el relator de la Onu, a la reunión. Y no tuvimos respuestas», dijo Schulman al término de la reunión.
Si bien la Liga sostiene que el sentido de la Reforma Judicial es correcto, también creemos que la misma es altamente insuficiente, ya que la modificacion va a ser mínima.
Desde el año 2017 hasta el 2019 la Liga denunció ante la ONU que en la Argentina no hubo «casos aislados de intromisión del Poder Ejecutivo sobre el Poder Judicial», sino que, como consta en la denuncia ante el relator de ONU para la autonomía de magistrados y abogados, hubo un plan sistemático de subordinación del Poder Judicial al Poder Ejecutivo.
Schulman se refirió a las «infinitas» maniobras que fueron mellando la autonomía del Consejo de la Magistratura, que lo convirtieron en un organismo de persecusión contra los jueces más comprometidos, como pasó con el doctor Carlos Rozanski, quien encabezó el juicio en el que desaparecieron a Jorge Julio Lopez, y fue obligado a renunciar por ese accionar persecutorio. La transformación de los juzgados de Comodoro Py en grupos de tareas es otra de las inquietudes que presentó la Liga en la reunión.
«Finalmente, vamos a ser querellantes en la causa por espionaje ilegal del macrismo sobre los presos políticos, y vamos a aportar los documentos que tenemos sobre esa persecución a los presos políticos que visitábamos», destacó Schulman, y advirtió que la ONu dió especificaciones directas sobre el tratamiento a los presos politicos en pandemia, y que el estado Argentino las ignora porque ignora la existencia de presos politicos.
«Es muy serio negar la existencia de presos politicos. Configura una gravísima violación a los derechos humanos, y dificulta enormemente toda la labor por lograr su libertad», denunció Shulman en otro tramo de la charla. Además, señaló que a los presos políticos que fueron funcionarios se los consideraba presos corruptos y se les aplicaba un protocolo especialmente armado para garantizar el espionaje.
La Liga tiene una lista con 41 presos políticos, y lleva acumuladas denuncias de organismos de derechos humanos de todo el país, desde seccionales de Neuquén a la cárcel de Florencio Varela y los penales de Marcos Paz, Ezeiza o Jujuy.
«No hay ninguna organización estatal que nos reconozca la existencia de presos políticos, que no solo no estan libres, sino que no son reconocidos ni siquiera en su identidad, una cuestión que es clave para nosotros – denunció Schulman -.
Nosotros defendemos a los presos politicos desde siempre. Los presos políticos no son un estorbo ni un problema. La existencia de presos politicos es el umbral de la discusión de los Derechos Humanos».
También se mostró disconforme con el hecho de que no se discuta el hecho de que existen presos políticos, ya que es un mecanismo «funcional al continuismo de la ultraderecha corrupta, de los que han violado todos los códigos y garantías procesales, los que han armado las causas mas grotescas de la historia argentina, y que siguen en su puestos».
«Necesitamos saber cuál es la política del Gobierno Nacional sobre los presos políticos. No estamos dispuestos a regalar 80 años de lucha por los presos políticos por un capricho semántico. En Argentina hubo y hay presos políticos. Queremos que estén libres, que las causas se revisen y los jueces que las ordenaron sean castigados como corresponde. No queremos mas impunidad».
Acerca de la Liga
La Liga Argentina por los Derechos Humanos es una institución dedicada a la defensa, la promoción y la educación para los Derechos Humanos. Nacida el 20 de diciembre de 1937 en el salón de actos del mítico diario Crítica, heredera de una tradición de lucha democrática, aspira a trabajar enraizada en los movimientos populares. Su lucha es por la dignidad de los seres humanos, por su derecho a ser protagonista en la construcción de una sociedad en donde la libertad, el pleno desarrollo de la democracia y el pluralismo sean realidad. Desde el comienzo, la Liga fue integrada por hombres y mujeres provenientes de distintas extracciones políticas y sociales. Nombres ilustres pasaron por sus filas. En el casi cien años de vida, la mayor parte bajo dictaduras, represión y estado de sitio, no dejó nunca de levantar sus banderas de libertad y justicia.
El trabajo en la actualidad tiene muchas aristas: querellas en numerosos juicios a genocidas civiles, empresariales y militares del último golpe militar; violencia institucional; derecho a la vivienda digna; la causa de lxs presxs políticxs; violencia de géneros; la solidaridad con los pueblos saharahui, palestino, cubano.
