La Justicia declaró la Inconstitucionalidad del nuevo protocolo dispuesto por la ministra de Seguridad y prohibió su aplicación en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Dicho protocolo habilita a la policía a disparar hasta por la espalda y sin dar la voz de alto.
El juez en lo Contencioso Administrativo y Tributario porteño Roberto Gallardo hizo lugar a una medida cautelar y decretó la inconstitucionalidad del nuevo protocolo.
El magistrado hizo lugar al pedido realizado por la diputada porteña Myriam Bregman, presidenta de la Comisión contra la Violencia Institucional en la Legislatura de la Ciudad, junto con la abogada de la abogada María del Carmen Verdú, de la Coordinadora contra la Violencia Policial e Institucional (CORREPI) y Carla Lacorte, víctima y sobreviviente de un caso de gatillo fácil.
También, declaró su inaplicabilidad en el territorio de la Ciudad de Buenos Aires y le ordenó al gobierno porteño que se abstenga de adherir al reglamento.
Para Gallardo, esta nueva doctrina de mano dura, lejos de aumentar la seguridad, “somete a los habitantes a riesgos adicionales”.
