Una expedición antártica descubrió una población de más de 1.5 millones de pingüinos adelaida, una de las colonias más grandes de esta especie de pingüinos.
La Antártida se derrite y su hielo marino se reduce cada año de manera más drástica.
Aunque este fenómeno nos afecta a todos, los damnificados más directos son los animales autóctonos. Los osos polares, las ballenas azules o los albatros se encuentran en peligro de extinción debido a la pérdida de hábitat natural y de individuos reproductivos.
Entre estos animales antárticos, los pingüinos son el ave marina más afectada. Los ecologistas advierten que la pérdida de hábitat natural es inminente en el caso de los pingüinos adelaida, mientras que los pingüinos emperador ya figuran como “casi en riesgo” según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Aunque existen diversas organizaciones como la IFAW (Fondo Internacional para el Bienestar de los Animales) que se preocupan por lanzar proyectos de protección y conservación para las poblaciones más vulnerables de pingüinos, la amenaza sigue presente y en muchos casos parece inminente.
Por eso es un alivio saber que una expedición antártica ha descubierto una población de más de 1.5 millones de pingüinos adelaida, una de las colonias más grandes de esta especie de pingüinos. El asentamiento se sitúa en los Islotes Peligro, un grupo de islotes diminutos en el mar de Weddell que conforman un archipiélago antártico de difícil acceso.
Este descubrimiento pone de manifiesto el impacto negativo de la actividad humana en la naturaleza. Pero es que además, tal y como lo expresa el investigador de la Universidad de Oxford, Tom Hart, “pone de relieve la necesidad de una mejora en la protección de la Península Antártica occidental, donde estamos viendo disminuciones drásticas”.
Aunque existen varios acuerdos internacionales para proteger diversas zonas de la Antártida, parecen no ser suficiente. Por eso las organizaciones ecologistas siguen realizando estudios científicos que abogan por la creación de áreas marinas protegidas y libres de actividad humana.
Sea como fuere, tenemos que entender que el estado de la Antártida es indicativo del estado de salud medioambiental de la Tierra, y por lo tanto de nuestro futuro.
Fuente: Bío GuiaTV