Este 31 de octubre se cierra el plazo para que los vendedores ambulantes desocupen los lugares que ocupan en el centro de la ciudad. La normativa que actualmente prohíbe la reventa y la venta ambulante, fue sancionada hace dos años y medio.
El reclamo para desalojarlos vino desde la Cámara de Comercio, que argumentó que la venta callejera les trae perjuicio a los comerciantes.
Elida Deanna Directora de desarrollo local, en diálogo con Radio La Tosca, manifiesta que durante los dos años y medios desde que salió la ordenanza se viene dialogando con los diferentes responsables de los puestos callejeros, que en estos últimos dos años han disminuido notablemente. Según informó Deanna en el 2016 había 27 puestos ambulantes que en la actualidad se redujeron a 8.
Refiere que al día de la fecha no han recibido contrapropuestas, al consultar por las medidas que se adoptarán llegado el momento Élida refuerza la postura de que se han arbitrado los medios para no llegar a la instancia final de tener que adoptar medidas, pero que de ser necesario, en caso de incumplimiento, se procederá a la elaboración de actas, multas o decomiso de mercadería.
Esta medida tomada, tiene como objetivo establecer escenarios de igualdad, generando una posición de equilibrio: Deanna manifiesta que en el caso de la reventa, los comerciantes para mantener locales abiertos deben abonar tasas, impuestos, alquileres y demás gastos inherentes a la actividad comercial, escenario totalmente diferente a la venta ambulante, quienes remarcó, se encuentran en una situación irregular “Derecho a trabajar sí, pero adecuándose al marco normativo”