Entrevistado por radio La Tosca, el economista Julio Gambina haciendo referencia al actual proceso económico en crisis dijo que “…para salir de la crisis del 2001-2002 en ese momento, el presidente Rodríguez Saá planteó la suspensión del pago de la deuda y al no ocurrir esto se avanzó hacia una gran devaluación que arrojó un enorme crecimiento de la desocupación y la pobreza. La devaluación actual no es una devaluación para desarrollar el mercado interno aunque desde el gobierno se sostenga que la Argentina pasará a ser competitiva”
Triaca ha dicho que la devaluación genera empleo y afirma que así crece la producción de automotores, “pero en los últimos meses lo característico es que ha caído la producción de automóviles y cada vez se importa más. Más del 70% de los autos en Argentina tienen productos de importación o sea, por cada auto que se fabrica en el país, el 70% de los componentes es importado”
“En términos teóricos generales tiene razón de que una devaluación puede generar mejores condiciones de competitividad, eso exige por supuesto la recuperación de la industria Pero eso no es lo que está señalando la coyuntura, porque hay una caída en el nivel de actividad a partir de mayo, fundamentalmente la industria manufacturera. La apuesta del gobierno dice estar puesta en que la devaluación va a frenar las importaciones y que va a generar mejores condiciones para reactivar el aparato productivo para reiniciar un proceso de crecimiento”.
“la devaluación genera un alto desempleo y parálisis de la actividad económica porque hay un deterioro de los niveles de ingresos de la población”.
Pero en concreto, “la devaluación genera un alto desempleo y parálisis de la actividad económica porque hay un deterioro de los niveles de ingresos de la población”.
«Ante el fracaso ahora se viene planteando la dolarización de la economía. Ecuador está dolarizado, la moneda que circula es el dólar. No se puede subir a un colectivo o comprar cigarrillos sin pagar con dólares. Por lo tanto el país que no fabrica dólares tiene que hacer que haya dólares para la circulación cotidiana y para eso debe haber ingresos de capitales destinadas a inversiones productivas. Hoy ingresan dólares vía prestamos destinados a pagar deuda y sostener la bicicleta financiera”.
En Argentina los dólares “ingresan por el ahogamiento y este último acuerdo con el Fondo Monetario Internacional se convierte en un mecanismo de acrecentamiento de la dependencia”.
“Hay que tener en cuenta que dolarizar es ajustar y acrecentar la dependencia. Es perder soberanía política y soberanía económica”.
“La devaluación afecta a los que menos tienen. Como ser, quienes han obtenido préstamos con un dólar que estaba a 20-22pesos y en unos meses sube a 30 pesos entonces se torna imposible pagar las cuotas, por eso han caído las operatorias de los préstamos UVA, muchas han caído y se ha desistido por la imposibilidad de pagar”.
“En 1917 Lenin citó como ejemplo de país política y económicamente dependiente a la Argentina Transcurrido cien años nuestro país sigue transitando el rumbo de la dependencia política y por la dependencia económica. El gobierno de Macri se caracteriza por el intento de inserción de la Argentina en la economía mundial y en realidad está profundizando esta dependencia”.
“Este gobierno vino a garantizar el aumento de las ganancias a las grandes empresas y hacer caer el ingreso de los trabajadores. Inició este año con un presupuesto donde la estimación de la inflación estaba ubicada en un 10% para todo el 2018 como si también que el dólar estaría estabilizado. El problema es que el dólar y la inflación se disparan y que la economía no crece”, expreso,
“Argentina está en plena recesión y sin crecimiento. Este año es probable que se crezca por debajo del 1%, lejos de los objetivos fijados. Todo esto ha sido solo discurso o expresión de deseos pero lo concreto que el único crecimiento que se advierte es en el sector especulativo, financiero y extractivista”
“El acuerdo con el Fondo Monetario Internacional este año va a significar la profundización del ajuste. El gobierno va a intentar comprometer a los gobernadores, especialmente al partido mayoritario que sean parte de la crisis descargada sobre el pueblo. Por supuesto es lógico que el peronismo va a presionar todo lo que pueda porque quiere gobernar y estamos en espera del 2019”.
“Por supuesto que hay resistencias. Crece la protesta social y su núcleo principal hoy son las dos CTA y los movimientos sociales” dijo en referencia a los paros del 14 y 25 de julio y a las últimas multitudinarias movilizaciones populares.
“Crece el descontento, crece la protesta y crecen mecanismos de organización de la protesta para que se instale la posibilidad de otra política
SE refirió a que: “Crece el descontento, crece la protesta y crecen mecanismos de organización de la protesta para que se instale la posibilidad de otra política. Por eso más que creerle al gobierno está haciendo falta definir cuál debiera ser una política de carácter alternativo que se lleve delante para resolver las necesidades de la mayoría de población”.
En cuanto al G20 explicó que “el G20 surgió en el año 99 con funcionarios de diferentes gobiernos para cobrar las deudas externas. Ese era su propósito y a partir de la crisis del 2011 se transformó de organismo técnico en organismo político, encabezado por presidentes y hay un conjunto de temas que se discuten en el G20 con el objetivo de incorporar más países subordinados a las políticas del país hegemónico”.
“En este escenario, los presidentes de México, Argentina o cualquier otro país subdesarrollado no tiene el peso político para resolver el problema mundial capitalista. La dependencia de Argentina y México lo ponen en situación muy desigual para intervenir con posibilidades de cambiar algo en el grupo G20”
Haciendo referencia a “toda la experiencia del ciclo progresista en América Latina se empezó a desandar, a desarticular con el golpe en Honduras y siguió con la crisis en Brasil y la caída del gobierno progresista en Argentina. Hoy la situación está muy centrada en Estados Unidos que es quién determina las políticas para el continente.
Opinó que, “Argentina preside el G20 en forma simbólica, sin un poder real. Los propósitos del G20 deben ser debatidos por las organizaciones sociales en cuanto a los perniciosas que sus políticas para los países dependientes como los de América Latina”
El 20 de Julio se reunirán en nuestro país los ministros de economía y en diciembre habrá una cumbre. “Este no es un organismo democrático sino que es un organismo que dicta las políticas del capitalismo mundial”
“Hay que crear las condiciones para confrontar con este modelo de dependencia y es necesario que se vayan pronunciando no sólo las organizaciones políticas, sindicales, cada uno de los parlamentos locales, provinciales y también nacionales de rechazo a las políticas de mas dependencia” dijo.
“Es muy importante denunciar el coloniaje moderno, porque eso es lo que significa el G20”, concluyó.