Celestino Córdova, condenado por el homicidio del matrimonio Luchsinger Mackay, lleva 15 días en huelga de hambre. Sus voceros y voceras piden que sea trasladado a su comunidad.
Según denuncian sus representantes, la situación ha significado un deterioro en las condiciones de salud de Celestino Córdova, por lo que insisten en la aplicación del convenio 169 de la OIT. «Hacemos responsables a gendarmería de Chile y a este gobierno sobre el agravamiento de la salud física y por tanto, responsables de la vida de nuestra autoridad espiritual Machi Celestino» expresaron.
Así lo manifestó también una de las voceras, Cristina Romo,en diálogo con el programa radial Rompiendo Límites. Romo enfatizó en que están todas las condiciones para que se cumpla el petitorio. El pueblo mapuche resiste frente al colonialismo y el capitalismo extractivista, y exige que se respeten sus reclamos tradicionales y espirituales. Esta es a las claras un ejemplo más de un juicio político.
En relación a tratamiento periodístico del caso Cristina resaltó que «los medios de comunicación lo condenaron inmediatamente» y por ello alegan que «fue un juicio viciado».
