La organización política Desde el Pie hizo saber, a través de un documento, su preocupación acerca de los actos de abuso por parte de fuerzas de seguridad en el marco de la cuarentena obligatoria.
Que la represión no se propague como el virus. No hay duda de lo oportuno y acertado que implica la cuarentena como medida para prevenir y hacer frente al coronavirus. Nuestro país actuó rápido en adoptar dicha medida obteniendo hasta el momento resultados muy superiores en términos sanitarios a los obtenidos en Estados Unidos, Italia y España.
Pero la pandemia y la realidad en la Argentina y La Pampa no es un compartimento estanco sin comunicación ni relación de sucesos. Las Fuerzas de Seguridad como estructura del Estado en nuestro país tienen un historial represivo del que muy difícilmente puedan desprenderse algún día. El contexto socio económico en el que se desarrolla este momento sanitario es adverso y muy complejo. Como muestra se encuentran las casi 10 millones de personas preinscriptas en el registro para poder cobrar por única vez los $10.000 del Ingreso Familias de Emergencia dispuesto por el Gobierno para paliar el impacto económico derivado de la pandemia de coronavirus.
El virus y la cuarentena obligatoria que se extendió hasta mediados de abril agudizan la ya precaria situación social existente en quienes como forma de subsistencia son jornaleros, trabajadoras de limpieza, changarines, cartoneros, quienes cuentan con trabajo no registrado o registrado pero en condiciones de flexibilización. Son casi seis millones y medio de personas, de los cuales el 40 % son pobres, viviendo muchos hacinados y/o en casas precarias. En Santa Rosa y Toay existe un 36 % de personas en la pobreza y son 11.000 viviendo en la indigencia.
En este contexto es que entra en vigencia el DNU 297/2020, de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, generándose en el país múltiples casos de abuso policial que atentan contra la población, situaciones represivas que vulneran los derechos humanos en este estado de excepción que estamos viviendo. Hechos documentados en Villa Crespo, Tucumán, Bell Ville, Tres Arroyo y Cipolletti.
En General Pico, un joven que salió a comprar pan recibió el impacto de balas de goma de la fuerza provincial. Hoy en el hospital Lucio Molas se encuentra en estado crítico de salud Francisco Vivandelli, quien fue detenido por la policía en General Acha por incumplir la cuarentena.
Que tienen en común todos estos casos? Se trata de jóvenes y familias de los sectores más humildes y que peor situación están viviendo por esta cuarentena obligatoria. Desde el gobierno Nacional y Provincial se están tomando medidas adecuadas en Salud que deben ir acompañadas del respeto irrestricto de los derechos humanos elementales. Es una obligación del Estado garantizarlo desde sus instituciones. Por eso nos parece preocupante este tipo de accionar por parte de la Policía de La Pampa y más aún la justificación por parte del Jefe de la Policía Provincial.
Nos parece que tanto el Ministro de Justicia como el Gobernador deben obrar políticamente para que no solo estos casos no queden impunes, sino que además no vuelvan a ocurrir. Más aun en estos momentos donde la solidaridad y el compromiso con el otro/a son fundamentales para hacer frente a esta pandemia que, sin lugar a dudas afectara más fuertemente a los sectores más empobrecidos, surgidos de políticas de estado que han garantizado el beneficio a unos pocos en perjuicio de las grande mayorías de nuestro país.
SI a las medidas para garantizar hacer frente a la pandemia.
NO a actos represivos que vulneren derechos.
SI a la solidaridad.
