Hace algunos días se realizó en Metileo una reunión con los intendentes de la microrregión II. El objetivo fue tratar “hotelería canina”, un proyecto de “refugio” animal. Desde la Fundación Vidanimal mostraron su rechazo ante esta iniciativa.
Desde la ong indicaron que ésta “hotelería canina será un depósito de perros que necesitan ser sacados de la vista de la misma comunidad que los abandona y del mismo Estado que se ausenta de políticas acordes”.“No es casualidad que los refugios se construyan en lugares apartados de la vista y la vida de la población. Esto responde a un hecho innegable de que si el problema no se ve, pasa a no existir. Son el resultado de la falta de políticas públicas y educativas tendientes a evitar el abandono de perros y gatos. No resuelven la falta de concientización sobre adopción y cuidado responsable”, dijeron a través de un comunicado de prensa.
En el mismo prosiguen que “contrario a lo que muchos creen, un refugio no es un instrumento para lograr la pronta adopción de perros y gatos que deberían estar allí transitoriamente, sino que se transforma en un depósito de animales que, normalmente, carecen de socialización humana ya que nunca van a tener el mismo efecto que provoca en los animales estar en el seno de una familia que los incluya y los cuide”.
Paula Lasalle, integrante de la fundación, explicó en el programa Rompiendo Limites que “los refugios fomentan la agresividad entre los animales y contagios de enfermedades masivas, ya que no hay métodos para detenerlos. Los gastos de mantenimiento son enormes porque se debe hacer inversión sin ningún tipo de contraprestación durante todo el tiempo que se mantiene un refugio, para: alimento, infraestructura, personal, cuidados veterinarios, etc. Se hace un mal uso de las arcas públicas, no se cambia el comportamiento del ciudadano y no se reduce la población animal”.
También indicaron que la adopción de los animales en refugio no se producen y, por el contrario, hay superpoblación en estos lugares. “Lamentablemente nuestros argumentos y experiencia no han sido tomados en cuenta por técnicos que forman parte del proyecto”, dispararon.
Lo que proponen en cambio como, vienen impulsando desde la creación de esta ONG, es realizar campañas de castración, como único método ético de control de la sobrepoblación de fauna urbana, vacunación antirrábica y desparasitación con presencia fuerte en cada barrio. “Este tipo de políticas es lo único que funciona en el mundo para evitar que nazcan más animales de los que la sociedad puede cuidar y en poco tiempo demuestran resultados siempre y cuando se respeten los parámetros para que sean eficientes”, aseguraron en el comunicado difundido.
