Las fuerzas de seguridad han retomado el control del Palacio de Planalto y del Congreso Nacional, luego de asegurar el Supremo Tribunal Federal. Hay 150 detenidos.
Los partidarios del expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, habían invadido en la tarde del domingo el Congreso, la Corte Suprema y el Palacio Presidencial en Brasilia. Además, se produjeron enfrentamientos de manifestantes con la Policía, que trató de dispersar a la multitud con gases lacrimógenos.
- El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha asegurado estar «consternado» por los actos de violencia y «ocupación ilegal» de las sedes de los tres poderes de Brasil por parte de «extremistas violentos». «Apoyo total a Lula y a su Gobierno, al Congreso y al Supremo Tribunal Federal. La democracia brasileña prevalecerá sobre la violencia y el extremismo», tuiteó el jefe de la diplomacia de la UE.»El lugar para resolver las diferencias políticas es dentro de las instituciones democráticas brasileñas, y no a través de la violencia en las calles», agregó en otra publicación.
- La presidenta del Partido de los Trabajadores brasileño, Gleisi Hoffmann, denunció que lo ocurrido esta jornada en Brasilia «no es un movimiento de masas, ni es espontáneo». Estos actos de violencia fueron organizados por «bandidos, que tienen intereses muy claros: minería ilegal, acaparamiento de tierras, liberación de armas, milicias y otras cosas, todo esto bendecido por Bolsonaro», aseguró Hoffmann.
- El mandatario de Francia, Emmanuel Macron, comunicó que Lula da Silva «puede contar con el apoyo incondicional» de París, señalando que «la voluntad del pueblo brasileño y las instituciones democráticas deben ser respetadas».
- El presidente Luiz Inácio Lula da Silva celebró una reunión de emergencia con sus ministros de Justicia, de Defensa y de Relaciones Institucionales para analizar el asalto a las sedes de los tres poderes en Brasilia.
- El secretario general del ALBA-TCP, Félix Plasencia, también se unió a los mensajes de solidaridad para Lula frente a los «actos de violencia perpetrados por grupos neofascistas que pretenden dar un golpe de Estado a la democracia de Brasil y desconocer la voluntad de su pueblo».
- El Departamento de Estado de EE.UU. también comentó sobre los acontecimientos en el país sudamericano.»Condenamos los ataques de hoy a la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema de Brasil. Usar la violencia para atacar las instituciones democráticas es siempre inaceptable. Nos unimos al presidente Lula instando al cese inmediato de estas acciones», retuiteó el organismo las declaraciones del secretario de Estado, Antony Blinken.
- El presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Arthur Lira, publicó en las redes sociales una nota de repudio contra la invasión del Congreso Nacional por parte de los simpatizantes de Bolsonaro. El legislador afirmó que los responsables de realizar el «atentado contra la democracia brasileña y sus principales símbolos deben ser identificados y sancionados de conformidad con la ley».Según Lira, la democracia difiere en los puntos de vista, pero no admite las «escenas deprimentes que sorprende a Brasil en este momento». Además, aseguró que la Cámara de Diputados actuará «con rigor para preservar la libertad, la democracia y el respeto a la Constitución».