Aumentan entre un 5% y un 7% dependiendo que sea Súper o Premium. Uno de los factores que generan inflación es el precio de los combustibles porque es uno de los componentes para la producción y es parte indispensable de la logística de cualquier producto.
Este nuevo aumento lo produce YPF, pero será trasladado por el resto de las petroleras.
Los nuevos precios tendrán vigencia a partir de este domingo
Todo lo que se traslada por aire, tierra, ríos o mar, necesita consumir este elemento fundamental. La lógica indica que cada vez que se produce un incremento en los combustibles, inmediatamente es trasladado a precios.
Impacta en los bolsillos de los asalariados y a la producción. Detener la inflación con estas medidas es imposible, teniendo en cuenta que las naftas acumulan aumentos ya superiores al 30% durante 2018.
La extranjerización del sector energético, tiene un efecto devastador para la soberanía energética del país. Atados a la dolarización del producto y a los precios internacionales, sin importar el costo real de los combustibles en Argentina, nos vemos expuestos a los vaivenes internacionales, a la devaluación y a la inflación.
Si aumenta el barril internacional de crudo, aumentan los combustibles y si se devalúa en Argentina también. Pura ganancia para las petroleras multinacionales. En este esquema es un cuento de nunca acabar.
Mientras tanto los que pagan y pierden siempre son los trabajadores y usuarios.
El recambio de Juan José Aranguren por Javier Iguacel al frente del Ministerio de Energía, no cambia nada. Algunos inocentes o no tanto, generaron expectativas alrededor del nuevo ministro, que sólo se realizó en un intento de descomprimir el descontento de la población por los continuos tarifazos.
Como queda demostrado, continuarán los tarifazos. Este no será el último incremento de los combustibles. En La Pampa con un menor valor por litro, por ser parte de la Region Patagónica, tendrá el mismo incremento.