La Red de Profesionales de la Salud por el Derecho a Decidir, hizo saber su preocupación por el aumento de medida del precio del Misoprostol. Se trata del medicamento esencial para garantizar la interrupción del embarazo en forma segura.
Actualmente el precio del Oxaprost supera los 6000 pesos cuando en el año 2012 el precio de dicho medicamento era de 330 pesos. Al tornarse este medicamento inaccesible, son las personas de menores recursos económicos las que más expuestas a riesgos están a las prácticas de abortos inseguros.
En este escenario se acentúa la injusticia social en el cual abortar y no perder la vida constituye un privilegio de clase. En el año 2005 la Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó el Misoprostol en su lista de medicamentos esenciales por haberse demostrado su eficacia y perfil de seguridad para el tratamiento de personas en situación de aborto.
El Misoprostol es una droga que en el último tiempo fue demonizada por los organismos antiderechos que continúan haciendo circular información falsa sobre su supuesta peligrosidad. Hablamos de un medicamento que hasta hace unos pocos años las farmacias se negaban a venderlo o lo comercializaban poniéndole altísimos precios tomando provecho de su baja disponibilidad y de la estigma social.
Hasta el año pasado sólo se encontraba en nuestro país a través del nombre comercial Oxaprost compuesto (Misoprostol + Diclofenac) medicamento inicialmente utilizado como antiinflamatorio en personas con afecciones gástricas. En octubre de 2018 la administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó el uso ginecológico del Misoprostol que ronda los 3800 pesos y cuyo precio se incrementa paulatinamente no encontrándose disponible en todas las provincias de igual forma.
En el año 2014 este medicamento había ingresado al programa oficial Precios Cuidados. Se trata de una droga que el Estado debería proveer a todos los efectores de salud para garantizar las interrupciones legales del embarazo (ILE) que contempla nuestro marco legal actual. A esta falta de abastecimiento por parte del estado se suma la necesidad de garantizar su cobertura por parte de las obras sociales que en forma aislada y gradualmente comienza a reconocerla en sus vademécums desde fines de 2018.
Como queda puesto el precio del Misoprostol no sólo fluctúa debido a la profunda crisis económica que atraviesa nuestro país, sino también lo hace debido a la especulación del mercado y al poder monopólico de las empresa farmacéutica.
