1 de Marzo: Jornada Nacional de Protesta: paros y movilizaciones en todo el país
El año en curso no deja de deteriorarse con la escalada inflacionaria a nivel nacional y provincial. Hubo una continuidad en los lineamientos centrales de la política educativa de ajuste y precarización, con una profundización y vaciamiento de las condiciones laborales, pedagógicas y salariales docentes. Recordemos que la pauta salarial y la “cláusula gatillo” han sido definidas en los últimos años por la Mesa Intersindical, y no por los sindicatos docentes reconocidos por la patronal.
Las medidas como ampliar la jornada laboral en la 5ª hora en Primaria, se justifican con los preocupantes índices de las evaluaciones estandarizadas, al servicio de señalar a la docencia como responsables del bajo rendimiento escolar. Como si el drástico incremento de la pobreza, con un 50% de menores pobres, no tuviese que ver con determinar las condiciones para desenvolver el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Si se promueve la extensión horaria, no podemos dejar de mencionar la necesaria revisión del nomenclador que castiga a la maestra de grado, como a los que ejercen cargos (auxiliares, especiales, asesorías pedagógicas, etc.), que trabajan más horas que las que les remuneran.
Este planteo choca con la realidad del cierre de escuelas rurales y hogares y sus cargos, que se implementa con el impedimento a la libre inscripción/ingreso en dichas escuelas, y se “disfraza” con el cambio de modalidad (jornada completa o con horario extensivo) y el traslado de los cargos a las ciudades más grandes (vaciando de trabajo y personas al interior de nuestra provincia).
Se necesitan cargos y equipos interdisciplinarios para atender las situaciones límites que se viven en las escuelas y colegios, que muchas veces se visibilizan en violencia física. Del mismo modo, que los cargos creados como los de preceptoría en jardines de infantes, incluyen la higienización de pequeñxs (cambio de pañales), cuestión delicada que debe tratarse en contexto de la ESI y los derechos laborales.
Párrafo aparte merece, el inicio de clases con altísimas temperaturas, sin tener las escuelas las condiciones para habitarlas, con el sólo afán de contabilizar días de clases. Las designaciones virtuales, lejos optimizar el sistema, genera jornadas maratónicas de incertidumbre, con desconsideración del tiempo y conexión de los docentes.
Por último, reclamamos por libertad y democracia sindical, por el reconocimiento de las organizaciones sindicales (SERyH y Sitep), como el reconocimiento a la conducción de la seccional Santa Rosa de la lista Rosa-Verde. Con estos planteos, convocamos a concentrarnos el 1 de marzo a las 18 hs. en plaza San Martín Santa Rosa, que la dignidad docente supere al matrato y la subordinación.
Sindicato de Trabajadores de la Educación Pampeana – Christian Rosso, Claudia Álvarez. Sindicato de Escuelas Hogares y Rurales – Bruno Paoli.