Desde la Asociación Trabajadores del Estado ATE La Pampa, hoy 3 de Julio queremos informar que quienes trabajadan en la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Santa Rosa en tareas especificamente relacionadas a la produccion cultural, se declaran en ESTADO DE ALERTA Y ASAMBLEA ante los sucesivos conflictos que se desarrollaron en los últimos meses y la violencia institucional que vienen padeciendo en sus ámbitos laborales.
En los seis meses de la nueva gestión hasta la actualidad, ningún área cuyo trabajo esté vinculado a la cultura pudo desarrollar cabalmente sus funciones ya sea por falta de materiales, herramientas, difusión, condiciones edilicias, mobiliario básico, ropa y calzado de trabajo. A esto se le suma la burocratización permanente del cotidiano laboral lo cual no sólo afecta a quienes trabajan en la dirección sino también, y fundamentalmente, vulnera el acceso al derecho a la cultura de la comunidad santarroseña.
Los elencos, coros, proyectos y actividades que se vienen desarrollando desde hace años en esta dirección, se han visto impedidos de empezar en tiempo y forma y desarrollarse como venían haciéndolo, por la desacreditación y el ninguneo del que vienen siendo víctimas.
Desde que Natalia Lara y Walter Llanson asumieran en el mes de Diciembre, se les viene solicitando a quienes trabajan en el Centro Municipal de Cultura que tengan «paciencia», pero hasta el momento no tenemos conocimiento del proyecto cultural de la gestión, sólo se ha comunicado un «plan de gestión» que únicamente esboza algunos puntos sobre como pretenden sea el funcionamiento de la dirección, carente de fundamentación, encuadre y objetivos; plan que ni siquiera están cumpliendo. Por todo esto solo podemos interpretar todo lo expuesto como una POLÍTICA DE VACIAMIENTO, al no existir al momento un proyecto cultural claro y definido en relación a la ampliación de éste derecho.
Al mismo tiempo, denunciamos que esta Secretaría modificó de manera unilateral el ORGANIGRAMA Y MANUAL DE FUNCIONES de la misma, creado por acuerdo paritario en el 2019, que tiene fuerza de ley. Esto, además de desconocer los procedimientos de la administración pública, contradice lo manifestado por el Intendente, Luciano Di Nápoli, quien afirmó haber reducido la planta de funcionarios, mientras crean nuevas jefaturas y coordinaciones que no existen en los organigramas.
Nos preocupa profundamente no llegar a un acuerdo con la patronal en relación a reconocer la Cultura como un derecho inalienable porque entendemos que su acceso efectivo posibilita y propicia el acceso a otros derechos.
En un momento triste y catastrófico para el país como el que estamos viviendo, con un gobierno nacional que corporiza la avanzada de la derecha reaccionaria y liberal quien lleva adelante un plan de destrucción y desfinanciamento de todos los programas, institutos y fondos garantes del derecho a la cultura, notamos a ésta gestión municipal en la misma línea.
Igual que con el macrismo los y las trabajadoras siguen siendo víctimas de un discurso estigmatizante. Mientras el municipio santarroseño se proclama como nacional y popular, sostienen que gran parte del presupuesto se va en el pago de sueldos y cargas sociales, poniendo en duda que el pago de los mismos se debe a la contraprestación por la fuerza de trabajo de las personas que se desempeñan laboralmente en la Municipalidad. Esta gestión desconoce que quienes trabajan en el municipio son responsables de hacer accesibles los derechos a la ciudadanía, así como también forman parte de la misma.
Las actitudes y el accionar de los y las funcionarias actuales son persecutorias y tienen como objetivo el amedrentamiento, como por ejemplo el pedido de información de viáticos rendidos con más de dos años de antiguedad, la arbitrariedad en el control de la asistencia de algunxs trabajadadorxs, la solicitud de firmar un acta para recibir un rollo de papel higiénico, la negativa de recibir a éste sindicato o responder sus notas, etc.
Las personas que trabajan en la Dirección de Cultura vienen realizando sus tareas en un clima de insalubridad: Emanación de líquidos y gases cloacales, presencia de roedores y cucarachas, deterioro edilicio, matafuegos vencidos y/o sin carga, botiquín de primeros auxilios con elementos vencidos y escasos. La falta de respuesta por parte de la patronal ante estas situaciones obligó a realizar la denuncia a éste sindicato para que se presente el Departamento de CyMAT y se intime a la gestión a implementar un plan de contingencia.
Quienes trabajan en el CMC tienen una historia de resistencia y lucha en defensa de los derechos culturales entendidos como parte de los derechos humanos.
Por esto ratificamos que todo lo que viene sucediendo, no es nada más ni nada menos que una política de vaciamiento.
Desde ATE, exigimos se abran paritarias para poder resolver las problemáticas que se vienen interponiendo al desarrollo de las funciones de los y las trabajadoras.
Ademas adjuntamos el audio de la nota que se le hizo en vivo a Liliana en vivo!