En el día de hoy, como todos los miércoles en la columna de jubilades y pensionades, nos acompaña Jorge Skolinck en dialogo con «el mundo vive equivocado».
Jorge menciona estar preocupados por todo lo que anuncian para el mes de marzo de ajustes y de brutal inflación. Las medidas de transporte en capital y el interior, son importantes aumentos que les impiden a los jubilados movilizarse y el gasto de los transportes es un presupuesto más.
Se han dedicado a juntar firmas para el transporte gratuito para jubilados y jubiladas, de manera online. Están abiertes a juntar firmas.
Como decimos nosotros «desde el cementerio no va a haber inflación, esto no es solo para jubilados sino para el todo el pueblo, le pega a todos el tema de cumplir con inflación cero».
«Ellos quieren a toda costa un ajuste, caiga quien caiga, se pelea con los gobernadores, medios y con todos».
Solicitan un aumento urgente al valor de la canasta básica de un adulto mayor, gratuidad al transporte, no al robo del fondo de sustentabilidad, normalización del PAMI, cese inmediato de la criminal política. «Solo el pueblo salvará el pueblo y será posible con unidad y organización».
«Lo nuestro no es un gasto es un salario diferido, es un dinero que le hemos puesto al estado durante años, nos obliga a pelear. Los jubilados cada vez más nos volcamos a la calle».
En conversación con Jorge, destaca «vamos a estar como todos los miércoles frente al congreso a las 16 horas, el número de marcha con el día hoy es de 1664».
Comunicado de Prensa 1664
LOS ENEMIGOS DEL PUEBLO SIEMPRE SON ENEMIGOS
Durante la campaña electoral ya vaticinábamos lo que podía esperarse de un gobierno encabezado por Javier Milei, un simple empleado descartable del poder económico hegemónico nacional e internacional. La única incógnita que algunos tenían era cuáles serían sus límites morales a la hora de ejecutar sus promesas de campaña. Como suele ocurrir muchas veces la realidad supera a la ficción. El gobierno de La Libertad Avanza y sus aliados macristas, hasta ahora, han demostrado no sólo ser unos miserables siervos incondicionales del poder al que hacíamos referencia, sino que no titubean a la hora de reprimir con métodos típicos de una dictadura a quienes se oponen a sus políticas antipopulares y antinacionales. Lo decíamos entonces y lamentablemente no nos equivocamos. Paralelamente el pueblo en su conjunto está dando sobradas muestras de capacidad y coraje político, El paro del 24 de enero, las movilizaciones y los cacerolazos rechazando el DNU y la Ley Ómnibus, son ejemplos palpables de la reacción generalizada en contra de las políticas que pretende llevar adelante este gobierno.
Entre esas políticas se encuentran las propuestas oficialistas para el sector previsional que demuestran el total desprecio del gobierno hacia las jubiladas y los jubilados. El robo del Fondo de Garantía de Sustentabilidad, hundir los haberes previsionales al fondo del precipicio, condenar a millones de adultos mayores a la pobreza extrema y la indigencia son sólo algunos de los objetivos de Milei, Caputo, Macri, Bullrich y compañía. Es tanta la voracidad que tienen que hasta llevan adelante una verdadera “caza de brujas” entre funcionarios y aliados, como ser, los miserables que los apoyan en el Congreso Nacional o desde un puesto en el Ejecutivo Nacional.
A nosotras y nosotros, trabajadoras y trabajadores jubilados y pensionados, sólo nos interesa la defensa irrestricta de nuestros legítimos derechos. Y en ese sentido convocamos desde nuestra identidad como Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones de Jubiladxs y Pensionadxs de la RA a actuar fuertemente en esa dirección en la más férrea unidad que seamos capaces de generar. Un primer logro fue desbaratar el intento de aprobar la ley Ómnibus.
Paralelamente estamos proponiendo en estos momentos que el Congreso nacional apruebe un proyecto de ley que haga posible que las jubiladas, los jubilados, las pensionadas y los pensionados sean beneficiados con la gratuidad del transporte público en todo el ámbito de nuestro país. A esta sentida reivindicación le sumamos la reiterada exigencia de un aumento de emergencia urgente que equipare al haber mínimo jubilatorio con el valor de la Canasta Básica de una persona adulta mayor, y proporcional en las escalas, y la normalización del PAMI.
