En un partido sin muchas situaciones de riesgo sobre los arcos, Belgrano le ganó por la mínima diferencia a Union de Miguel Riglos.
Con el arbitraje de Cristian Rubiano, de discreta actuación, se vió un partido disputado intensamente, con mucha dinámica y con escasas llegadas a los arcos.
En la zona del medio campo se disputaba el partido con mucha pierna y dientes apretados. Al arco no se llegaba mas allá de un centro con pelota parada o producto de algún rechazo-pelotazo que salía desde las defensas.
Belgrano llegó al gol con un cabezazo de Gabriel Exner que de alguna manera llevaba algo de justicia, no por superioridad en el juego, solo porque fue quien intento mas.
El segundo tiempo fue de similares características, aunque con mas intentos ofensivos por parte de Unión de Miguel Riglos, que introdujo algunos cambios que le dieron mas profundidad, especialmente el jugador numero 16, un joven que aparece diferente. Tiene toque, es hábil y no le escapa al juego brusco de los rivales.
En el global, un empate hubiera sido lo mejor, mas que nada por el planteo amarrete de Belgrano que especuló todo el segundo tiempo con algún contragolpe, sin intentar recuperar la pelota y con juego llegar al arco.