Mientras millones de cubanos nos preparamos para celebrar el fin de año, un grupo de terroristas radicados en Miami, planifican acciones de desestabilización en la isla y siguen apostando por la violencia y el terror. Gracias a la denuncia oportuna y a la intervención de los órganos del Ministerio del Interior, se desarrolla en este momento una exhaustiva investigación que impidió la concreción de los planes desestabilizadores
Mientras millones de cubanos nos preparamos para celebrar el fin de año que se acerca, un grupo de terroristas radicados en Miami, Estados Unidos, planifican acciones de desestabilización en la isla y siguen apostando por la violencia y el terror, y unos pocos en Cuba, les siguen el juego.
Esta importante denuncia sobre planes y acciones enemigas contra Cuba organizados desde el exterior, y que son investigadas por los órganos del Ministerio del Interior, fueron presentados en el Noticiero Nacional de la Televisión cubana.
El periodista Humberto López explicó que los cubanos implicados en estos hechos y residentes en Estados Unidos tienen vínculos con terroristas que radican en ese país y que promueven acciones violentas contra Cuba.
Estas personas han recibido entrenamiento militar en Estados Unidos, preparación física y recursos para ejecutar estos planes. Entre los implicados, están, además de los investigados, terroristas que han sido incluidos en la lista que se publicó en la Gaceta Oficial de personas buscadas por las autoridades cubanas a partir de la promoción, la planificación y el financiamiento de actos de terrorismo contra Cuba.
En su explicación, Humberto López refirió además que, teniendo en cuenta que se trata de una investigación en curso, se aportarían más detalles en días futuros,«se están orquestando planes para que el fin de año sea el escenario ideal para la violencia y el terror», señaló.
Una de estas personas es Manuel Milanés, con expediente abierto en 2021 por incitar a la realización de acciones que afectan el orden social en Cuba, mediante actos violentos contra funcionarios y entidades económicas, así como promover la acción armada contra Cuba.
Entre las acciones solicitadas a los cubanos reclutados se encuentran la agresión a funcionarios, la quema de cañaverales, de casas de tapado de tabaco, para lo que debían estar preparados, esperando la hora cero, que sería la hora de invadir Cuba para derrocar al Gobierno, destacó.
Otra de las personas identificadas por los investigados es Miguel Gómez (Miki Terrori), quien mantiene vínculos con Manuel Milanés Pizonero, William Cabrera González, quienes residen en Estados Unidos, y con Guillermo, «el Coco, Fariñas».
Otro cubano, también bajo investigación penal, menciona a Amijail Sánchez González, procesado en Cuba por varios motivos, como portar armas ilegalmente, sacrificio de ganado mayor, homicidio involuntario, entre otros. Sánchez González emigró a Estados Unidos en 2020 y desde ahí ofreció financiación para la realización de actos terroristas en territorio cubano.
Michel Naranjo Riverón (Kiki Naranjo) es el otro nombre mencionado, procesado en Cuba por varios delitos y que emigró a Estados Unidos en 2020. Desde redes sociales, explica López, ofrece financiamiento para la realización de acciones terroristas en territorio nacional.
Explicó además que« la lista nacional, con fuerza vinculante y peso legal, que incluye a terroristas buscados por autoridades cubanas, tiene una fuerza extraordinaria».
Concluyó que algunos en el exterior siguen apostando por la violencia y por el terror y unos pocos en Cuba le siguen el juego. Sin embargo, agregó, la denuncia popular, el descubrimiento temprano, la investigación profunda y la justa sentencia serán siempre el camino.
Autoridades cubanas frustran planes desestabilizadores de terroristas radicados en EE.UU.
En días recientes, un cubano residente en Estados Unidos, procedente del sur de la Florida, arribó de forma ilegal a la costa norte de Matanzas, con el objetivo de llevar a cabo acciones violentas en nuestro país.
Gracias a la denuncia oportuna y a la intervención de los órganos del Ministerio del Interior, se desarrolla en este momento una exhaustiva investigación que impidió la concreción de los planes desestabilizadores durante este fin de año.
Los resultados preliminares de la pesquisa arrojan que el terrorista llegó a territorio antillano en una moto acuática, con prestaciones que permiten su navegabilidad. Se ocupó armamento luego de su detención.
Desde la provincia de llegada se trasladó hasta de Cienfuegos, su territorio de origen, donde contactó con varias personas con el propósito de reclutarlas.
Durante el transcurso de la investigación saldrán a la luz los detalles de esta tentativa de ataque contra Cuba. Sin embargo, hay elementos que ya se pueden afirmar: los cubanos residentes en Estados Unidos, tienen vínculos con terroristas que radican en ese país y que promueven públicamente acciones violentas contra Cuba. Además, han recibido entrenamiento militar con armas, preparación física y recursos para ejecutar estos planes en territorio nacional.
Entre estas personas se encuentran los implicados, y entre ellos también, terroristas que han sido incluidos en la lista de personas sometidas a investigaciones penales buscadas por las autoridades cubanas a partir de su implicación en la promoción, planificación, organización, financiamiento de actos de terrorismo contra Cuba.
La denuncia popular, el descubrimiento temprano, la investigación profunda y la justa sentencia para los responsables será siempre el camino. La impunidad, jamás.
Fuente: Juventud Rebelde