El presidente electo contará con una inédita cadena nacional durante todo el acto de asunción. Su equipo posterga el llamado a sesiones extraordinarias del Congreso Nacional. Hablan de una “ley tren” y no “ómnibus”. Las dudas de los gobernadores de todos los colores y la compleja geografía parlamentaria.
Apenas reciba los atributos presidenciales en el Congreso, Javier Milei saludará a la Asamblea Legislativa y velozmente le dará la espalda para dejar el recinto. Cumplirá una parte de los ritos de rigor constitucional y no dará el discurso ante senadores y diputados. En su lugar saldrá rápidamente por donde vino, cruzará la puerta principal del Palacio Legislativo, bajará las escalinatas y se acomodará sobre el mini escenario armado para la ocasión. Desde allí, al aire libre, buscará hablarle a quienes participen de la movilización que está armando La Libertad Avanza para apoyarlo.
En ese momento Milei ya será presidente de la Nación. Hablará a través de una inédita cadena nacional que se extenderá por tres horas y media y que impedirá todo tipo de coberturas periodísticas. El foco estará puesto sobre la escenografía construida. Buscará explicarle a sus seguidores el diagnóstico que utilizará para justificar el sacrificio económico que afrontará la población en los próximos meses.
En su discurso Milei podría delinear un desolador panorama que reflejará su punto de vista sobre la situación del Estado y la economía. Será la clave para anticipar el ajuste que vendrá, con un dispositivo de comunicación inédito. El mensaje no estará solamente concentrado en el público presente. Sería transmitido por radio y televisión, pero a través de una inédita resolución del Ente Nacional de Comunicaciones que extiende la cadena nacional por tres horas y media: desde las 11.30 hasta las 15.
La resolución fue firmada este sábado a las 19 por el director nacional de Servicios Audiovisuales del Enacom, Martín Klimberg, y obliga a todos los medios «de comunicación audiovisual del país y las señales nacionales inscriptas como género periodístico y de noticias» a integrarse a la cadena. Una alta fuente del ENaCom confirmó en reserva a Tiempo la vigencia de la resolución N°2023-146762064-APN-DNSA#ENACOM, que extiende de manera inédita la cadena nacional a 210 minutos en donde ningún medio audiovisual podrá transmitir otra cosa que la cadena, sin posibilidades de que existan coberturas periodísticas en vivo antes de la ceremonia, salvo el material que provenga de la cadena. El paso de Milei por el Congreso durará tres horas y media entre su ingreso, la ceremonia y el discurso que ofrecerá afuera. Todo saldrá enlatado y sin margen para las transmisiones habituales de cada medio.
El mensaje también estará dedicado a todos los legisladores de las dos cámaras del Congreso. Les dará la espalda desde la escalinata y buscará interpelarlos desde la escenificación armada en la puerta de entrada al Palacio. Le hablará a la calle y desde ahí buscará transmitirle a diputados y senadores que aunque no tenga mayorías en el Congreso buscará empujar el shock económico que prepara amparado en el capital político que obtuvo en la segunda vuelta. Aunque le dé la espalda, Milei le hablará al Congreso igual. Se amparará en el resultado del balotaje y buscará interpelar a un poder legislativo cuya nueva composición fue definida en las generales del 22 de octubre, cuando el entonces candidato presidencial no pudo ganar en primera vuelta, quedó segundo atrás de Sergio Massa y dejó afuera a Juntos por el Cambio. De esa batalla electoral surgió la composición del Parlamento que entrará en ejercicio este domingo.
Los protagonistas del recambio de un tercio del Senado y de una mitad de la Cámara Baja juraron este jueves. Responden a una geografía numérica donde el panperonismo sigue siendo primera minoría, frente a un nuevo oficialismo que, para los próximos dos años, sólo contará con 7 de los 72 senadores y 37 o 38 de los 257 diputados.
El primer acto presidencial de Milei tendrá ese voltaje simbólico. Tiene previsto aferrarse al resultado electoral para que no termine en una derrota legislativa el periodo de sesiones extraordinarias que convocará. El examen será para el paquete de leyes que prepara y, en especial, el próximo ministro coordinador Nicolás Posse. Cuentan que el próximo jefe de Gabinete recibe a los equipos técnicos de cada área para escuchar las propuestas que tienen para llevar al Parlamento o, en caso de considerarlo necesario, firmar decretos de necesidad y urgencia. Cerca de Milei no hablan de «ley ómnibus» sino de la «ley tren» porque comprende un paquete de proyectos encadenados entre sí.
Un funcionario que este domingo estrenará su despacho confirmó a este medio que el tren va a demorar en llegar al Congreso Nacional. «Va a entrar esta semana, pero ya nos advirtieron en Juntos por el Cambio y en otras fuerzas que no nos van a votar una ley ómnibus, que incluya todo, sino que quieren ver todo en detalle», explicó. Otras fuentes sostienen que el paquete de textos que coordina Posse tiene fallas jurídicas y que eso los obliga a ganar tiempo. Las comparecencias ante el «examinador» que ocupará la jefatura de Gabinete vienen demoradas y también les exige tiempo.
A partir de este domingo los integrantes del gabinete comenzarán a ocupar sus despachos. Una parte dejará las oficinas de Avenida del Libertador. «En el 602 nos reunimos hace rato», detalló uno de los asistentes a los pisos de un edificio donde está Neuss Capital, el fondo de inversión que ocupa la planta 23 y que lidera Germán Neuss, cabeza visible de una poderosa familia que tuvo grandes negocios durante el menemismo y con la Alianza, como la privatización del espectro radioeléctrico a través de la firma Thales Spectrum.
Una parte de los cambios que se vienen, y que posiblemente sean transmitidos en la extensa cadena nacional, implicarán una serie de giros abruptos en el tipo de cambio que impactarán en el aumento de los precios relativos y una mayor proyección de la inflación para los próximos meses. En ese contexto será el final de este año y el comienzo del 2024. Con ese mar de fondo el próximo oficialismo deberá buscar acuerdos para que avance en el Congreso el paquete de leyes que sigue en diseño. En materia laboral, los proyectos implicarían el fin de la ultraactividad de los convenios colectivos para que no puedan extender su vigencia más allá de su fecha de vencimiento, la reducción de las multas laborales a las empresas por violar la ley y cambios en el fondo de desempleo para avanzar en una segunda etapa. Uno de los temas que genera más temores y preocupaciones, incluso en LLA, tiene que ver con cambios en la ley de movilidad jubilatoria y una posible reducción en los aumentos, a pesar de la inflación que se avecina. Algunos sostienen que Milei lo descartó en la reunión que mantuvo esta semana con sus legisladores y otros creen que lo incluirá en las medidas que prepara.
Un gobernador de JxC confirmó a Tiempo que no tienen información sobre las medidas ejecutivas y los proyectos. «No sabemos por donde van a venir, si será un set de proyectos o alguna reforma en particular», lamentó el mandatario.
En su equipo admiten que la preocupación de la mayoría de los 10 gobernas de JxC tiene que ver con el impacto de una devaluación abrupta que impactaría en el endeudamiento en dólares de distintas provincias. Algunas, como Entre Ríos, que gobernará Rogelio Frigerio, y Chubut, que conducirá Ignacio Torres, tendrán grandes vencimientos en febrero y marzo. Son sólo dos pantallazos del abanico de preocupaciones que comienza por la distribución de la coparticipación y la reasignación para 2024 de partidas del presupuesto de este año porque «el tren» no incluirá un plan de cuentas nacionales para el año que viene. La relación de las provincias de todo pelaje político quedará a merced de la lapicera de Milei, Posse, el ministro de Hacienda Luis «Toto» Caputo y el de Interior, Guillermo Francos.
Todos jurarán a partir de las 15 en el Museo del Bicentenario, pero la idea original apuntaba a hacerlo sin la presencia de la prensa para garantizar la «intimidad» del evento.
Los representantes de JxC en el Congreso tienen casi la misma preocupación que los gobernadores de su espacio, pero también la misma predisposición. Más allá de las demostraciones de fuerza que alumbrarán nuevos bloques, los consultados dan por hecho un cimbronazo económico pero asumen que «coincide» con las definiciones que habían hecho Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich en campaña, antes de las PASO de agosto. «El verdadero apoyo arranca cuando empiecen las medidas. Milei lo viene planteando: un tema será el clima de la calle, pero el otro será tener coherencia con lo que plantearon nuestros precandidatos en la campaña. No teníamos muchas diferencias con lo que Milei quiere hacer ahora», resumió una espada legislativa. Sin embargo, cerca de los gobernadores de JxC (tanto radicales como macristas) consideran que si Milei no los hace parte del consenso para votar leyes y respaldar medidas «entonces les esta dando una excusa para que no sean generosos en la negociación de los proyectos que van a mandar».
«No le vamos a dar un cheque en blanco, pero para arrancar le vamos a dar el beneficio de la duda», anticiparon cerca de otro mandatario que promete ser opositor, pero «constructivo». Dicen que buscarán darle racionalidad a la discusión que se viene, pero negaron que no haya colaboración. «¿Es doloroso votar medidas de este tipo en un marco complicado?», se preguntó, otro protagonista del futuro gobierno de Milei. «Sí, es doloroso», se contestó, y confió que, a pesar del impacto social que tendrá el ajuste, contarán con el respaldo de JxC.
Si no se concretan los gestos prometidos, habrá más DNU de los deseados.
«Estos seis meses serán de inflación alta para todos, pero es producto de las medidas del gobierno saliente», aseguró un dirigente de LLA. Es otra pincelada de las argumentaciones que Milei enunciará para anticipar un ajuste tan inédito como la cadena nacional que utilizará. El líder de ultraderecha, que luego de asumir recibirá a mandatarios de la misma orientación, está convencido de contar con el respaldo suficiente para hacerlo, aunque arranque dándole la espalda al Congreso, justo a 40 años de la recuperación democrática del 10 de diciembre de 1983.
