PARA QUE LAS IMPRESIONES CONFUSAS NO SE CONVIERTAN EN VERDADES IRREFUTABLES
Cuando analizamos la importancia de la legislación es necesario referenciar que el marco jurídico argentino se corresponde a los compromisos internacionales que se asumen como Estado Parte de los organismos internacionales tales como la ONU o la OEA por mencionar algunos.
Tales compromisos internacionales se materializan al delinear Políticas Públicas que garanticen el acceso a derechos humanos a sectores tradicionalmente vulnerados. Desconocer este rol fundamental del Estado pone en riesgo la vida de las mujeres, niñas y personas con capacidad de gestar. Esto sucede, cuando se imponen las dilaciones y las dudas; cuando los argumentos y definiciones políticas no están acordes con la responsabilidad como representante de un partido político y se convierten en desinformación. Desinformar es una estrategia que utilizan algunas personas, en uso del poder por el lugar que ocupan, construyendo ideas equivocadas de manera intencional, llevando a la comunidad saberes erróneos que no fortalece en derechos. Entendemos que tales prácticas son, para la salud argentina en general y la pampeana en particular, un retroceso; como lo es desconocer las estadísticas, los protocolos, la capacitación y los avances en materia de inversión en prácticas sanitarias seguras y el impacto que tendrá, en el ahorro para los sistemas de salud, la legalización de la interrupción del embarazo.
Tal como afirma Mabel Bianco (Cámara de Diputadas/os 1/12/2020), frente a la ausencia de una IVE, se está ejerciendo violencia hacia las mujeres e identidades gestantes, tal el caso de mujeres y niñas que necesitadas de interrumpir un embarazo no deseado, no pueden satisfacer tal necesidad ante la falta de una norma que regule tal derecho. Es hipócrita y violento que, mientras a las mujeres en general no se les posibilita el acceso a tal derecho, existen otras que pueden resolver tal situación, sin arriesgar su vida, porque tienen recursos económicos y sociales. La existencia de una norma que habilite la interrupción voluntaria del embarazo es una acción política de justicia social.
Entonces, a aquellas/os representantes de la ciudadanía que han manifestado condicionamientos para acompañar la votación del proyecto en discusión en la Cámara de Diputadas y Diputados de la Nación, les decimos: Hoy vivimos, hoy viven como representantes, un acontecimiento de profunda resonancia política; hoy tienen la oportunidad de transformar una profunda injusticia social que condena a tantas mujeres a la clandestinidad del aborto arriesgando su vida y salud. Porque, Sr. Diputado el aborto existe. Sr. Diputado, vaya al fondo de la cuestión, esta es una cuestión de profunda implicancia social; deje a un lado creencias y tradiciones y vote ampliando derechos, las mujeres se lo agradeceremos.
Sr. Diputado la causa de muerte de mujeres argentinas por abortos ilegales son irrebatibles, es un dato de importancia en la agenda política nacional el generar posibilidades concretas de acceso igualitario a la atención de la salud reproductiva y sexual, y a la interrupción del embarazo como senda que nos permita otear el horizonte en la subterránea escala de la justicia de género. El marco legal de causales, vigente desde 1921 en al artículo 86 de nuestro Código Penal, no ha logrado resolver a pesar de todos los avances registrados mediante los protocolos nacionales y locales, el problema de las profundas desigualdades territoriales que subordina a las mujeres y personas gestantes a una inaceptable discriminación e inequidad sanitaria. El reconocimiento a la autonomía física de las mujeres y la soberanía sobre las decisiones que afectan su salud y/o su vida es una obligación que ningún Estado puede desatender y que el marco normativo actual no contempla en tanto delega tal decisión en los equipos de profesionales tratantes. Una ciudadanía plena para las mujeres es un compromiso que amplía y profundiza nuestra historia como una verdadera democracia.
Diputado ¡QUE SEA LEY!
Instituto Interdisciplinario de Estudios de Géneros, UNLPam
Asociación Pampeana de Medicina General, Familiar y Equipo de Salud.
FOTO, Radio KERMES
